Es así

Te abandonas en el sofá mientras afuera el viento hace alaharaca, como un macho en pos de la atención de una hembra. Ahorro vs derroche de energía, y al final todo acaba en ese estado de semivigilia que precede a la entrega de los sentidos.

Segundos antes de la rendición, algunas de las interrogantes que ocupan tu mente obtienen respuesta, en una suerte de Nirvana desechable.

Por desgracia, las epifanías están sobrevaloradas. Las respuestas que ahora importan se han ido de vacaciones.

Y el jodido verano apenas comienza.


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