Ciudadana del mundo
(Miércoles 6 de junio de 1978, Maternidad Conchita, Monterrey, Nuevo León)
La primera vez que me dijeron que no parezco regiomontana confieso que me indigné. La última vez que me lo dijeron, hace algunas horas, lo tomé como un halago. Y es que a mis coterráneos ni cómo ayudarles me cae. Cada vez descubro en este rancho industrializado personas provenientes de otras entidades del país y del extranjero que expresan lo sacados de onda que quedan al conocer más a la raza de esta ciudad, antaño famosa por su franqueza, tranquilidad, generosidad, honradez y esa sarta de cualidades. Que conste, no generalizo, pero lo cierto es que esos estereotipos van quedando demodé, si no es que ya están de ese lado.
Mis rasgos físicos, cáracter, forma de hablar y/o ideas me han ubicado como defeña, oaxaqueña, chihuahuense, sonorita, tapatía e incluso indocumentada centroamericana, en una ocasión cuando viajaba vía terrestre en la ruta DF-Mty y el autobús fue detenido por un retén de la PGR, del cual uno de sus elementos tuvo a bien despertarme echándome la luz de una linterna en el rostro, espantando el sueño tan sabroso que había agarrado en plena madrugada, algo raro puesto que cuando viajo de noche soy presa del insomnio.
-¿Cómo se llama?-
-Alma Ramírez- (respiro jondo)
-¿De dónde viene?-
-Del DF-
-¿Pa dónde va?
-Monterrey- (respiro más jondo)
-¿De dónde es?-
(en eso ya me emputé y gruñí)
-¿Pa qué quieres saber?-
-Usté conteste lo que le estoy preguntando-
-Por eso, ¿pero pa qué quieres saber?-
-¿Viene sola?-
-¿Y si vengo sola qué? Si quiere le canto el Himno Nacional com-ple-ti-to(lamenté no traer mi acreditación de prensa)
- .......... - FIN
Después de este paréntesis, enumero algunas de las razones de pasmo de los foráneos ante the regius race:
"No son francos sino hipócritas,le dicen franqueza cuando critican, pero cuando se las volteas le llaman ataques".
"Van a misa todos los domingos, juran que no toman ni se meten drogas, pero cuando salen de su círculo social son los que más pedos y cocos se ponen y hasta te patrocinan el desmadre a condición de que guardes el secreto".
"Hablan de tolerancia y que cada quien su vida, pero jamás aceptarán a un pariente gay, o con VIH o peor aún, pensante".
"Hablan de monogamia pero los ves en el Hooter´s babeando por las meseras (eso equis), o si vas a un table son los que están en primera fila".
"Son bien cerrados, si no eres de su círculo o no eres amigo de un integrante de éste, es como si no existieras".
"No les interesa conocer otros puntos de vista ni maneras de ver el mundo que no emmbonen con su lifestyle y cosmogonía".
"Son unos brutos para manejar".
"Creen que iendo a chivear a Mc Allen o a huevonear en La Isla son más gringos y más nice".
"Son los primeros en gritar: basta de transas, pero también en soltar el moche".
"Presumen de cultos, pero no leen ni en defensa propia, por lo tanto no piensan".
"Su doble moral me da mucho miedo".
Obvio es que esos regios promedio negarán y se indignarán ante tales comentarios, pero lamentablemente en gran medida son ciertos. Y eso mina al resto que no somos así, a grado tal que no creen que provengamos de esta ciudad que pese a estos prietotes en el arroz, ocupa un lugar vital en mí. Yo por mi parte, siempre me he hallado mejor entre forasteros y entre ellos se encuentran algunos de mis mayores afectos: mis mejores amigas, mi viejo, mi padrino literario y de cinco a diez compas.
Amo y odio a Monterrey, y bien sabemos que ambos sentimientos, aunque opuestos, tienen más vínculos que nada. Lo demás son sólo buenos deseos.
Comentarios
Bueno es una teoría...Mucho gusto y saludos