
Recobró la conciencia unos diez minutos después del choque. Mientras contaba las gotas de sangre que salían de su cabeza, recordó que no tenía seguro médico.
Así que eligió morir.
Lo último que vio fue la telaraña que su cabeza dibujó en el parabrisas.
Comentarios
Es tan cruel como la realidad. Aveces uno elige dejarse morir, no?
besos